Como es de costumbre en cada comienzo de temporada, los clubes bolivianos hicieron mucho ruido en la etapa de fichajes, pero el equipo que arrasó con nuevas contrataciones fue Sport Boys (15), seguido por Blooming (15), Nacional Potosí (14), Real Potosí (13), Wilstermann (11), Petrolero (11), Universitario (11), Oriente Petrolero (9), Guabirá (8), San José (5), The Strongest (5) y Bolívar (3).
El Toro warneño, campeón del torneo Apertura 2015-2016, a la cabeza de técnico más exitoso de Bolivia, Eduardo Villegas, se llevó a los mejores elementos nacionales, uno ellos Jhasmani Campos, quien militó la pasada temporada en el fútbol de Kuwait y que además anotó uno de los mejores goles de la Copa Centenario en Estados Unidos, vistiendo la casaca de la Selección; además de Omar Morales, Edivaldo Rojas, Samuel Galindo y otros. Pero tampoco se olvidó de los elementos en proyección como Leonardo Vaca, Cristian Coimbra y Alan Mercado.
Mauricio Soria, nuevo técnico de Blooming, revolucionó el movimiento de contrataciones con nuevas caras de jugadores extranjeros: David Di Stéfano (Argentino), Ricardo Duarte (Brasil), Emanuel Bocchino (Argentino), Marcelo Vidal (Argentino), Carlos Herrera (Argentino) y Mariano Guerrero (Argentino). Entre los nacionales eligió a sus mejores cartas: Gustavo Pinedo y Augusto Andaveris.
Por su parte, el conjunto de Nacional Potosí, que comenzó a realizar contrataciones al mando del técnico Edgardo Malvestitti, al final terminó pasando el control al argentino Ángel Félix Ibáñez, que se encargó de hacer las últimas contrataciones. Entre lo más destacado que consiguió el equipo potosino es la eficacia en la delantera con Martín Palavicini.
En tanto, los dirigentes de Real Potosí junto con el técnico mexicano David De La Torre optaron por dar confianza a jugadores jóvenes, tal el caso del atacante valluno Vladimir Castellón y el mediocampista Rodrigo Borda. Pero no se olvidaron de los futbolistas de experiencia como Ronald Gallegos y Alejandro Bejarano.
Mientras, Wilstermann intentó mantener la base del equipo que logró la corona del Apertura 2015-2016, pero también reforzó todos los puestos con jugadores de amplia trayectoria como Luis Méndez, Jorge Ortiz, Ricardo Verduguez y Mauricio Saucedo.
Petrolero, con Milton Maygua como adiestrador, trajo elementos claves en las posiciones que vio por conveniente. Aseguró los goles con Gastón Mealla y en defensa se resguardó con Ronny Montero. También abrió las puertas a jugadores jóvenes como Sebastián Reyes y Widen Rojas.
El club capitalino primero se preocupó por mantener la base de su equipo y después buscó llenar algunos vacíos con futbolistas del exterior que ya son conocidos en el medio, el caso de Eduardo Vallecillo, que jugó en Aurora. Pero el entrenador Javier Vega se aseguró la solidez del equipo con gente de experiencia como Miguel ángel Hoyos y Gerson García.
Ante la sorpresiva renuncia del entrenador Ángel Guillermo Hoyos, porque los dirigentes de Oriente no consiguieron retener a los jugadores del equipo titular, el primer paso del presidente, Ernesto Álvarez fue contratar al nuevo técnico, Wilson Gutiérrez fue el elegido y de ahí en adelante iniciaron las contrataciones. Entre lo más sobresaliente está la presencia de los uruguayos Gonzalo Sena y Freitas. El resto de los nuevos jugadores que vestirán la casaca albiverde son futbolistas jóvenes que en algunos casos retornan a casa, como Carmelo Algarañaz, luego de su paso importante en Petrolero.
El recién ascendido, Guabirá, no se quedó a atrás y aseguró en el pórtico a Carlos Arias y en la delantera a José Alfredo Castillo.
Por su parte, San José, bajo la premisa de otorgar más confianza a los jugadores jóvenes y nacionales contrató a Gustavo Salvatierra y Amílcar Sánchez, ambos exWilstermann, pero también combinó con elementos de experiencia: Damir Miranda y Gerardo Yecerotte.
Entretanto, The Strongest con pocas contrataciones, pero con el once base asegurado, trajo a Marvin Bejarano y Pablo Pedraza para reforzar el armamento.
Finalmente, Bolívar sólo hizo tres contrataciones: Eduardo Fierro, Hugo Bargas y Enrique Flores. Empero consiguió conservar la estructura del equipo.
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