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lunes, 18 de octubre de 2010

Clausura 2010: Oriente Petrolero 2 - Aurora 2


La Prensa


Empató con Aurora y se quedó con las ganas de llegar al primer lugar de las posiciones. El arquero del Equipo del Pueblo, Silvio Dulcich, fue la figura del compromiso.

Santa Cruz / El Deber.- Lo que sucedió anoche en el Tahuichi fue increíble. Los hinchas no podían creer cómo Oriente dejaba pasar por alto una oportunidad inmejorable de ser el único puntero del Clausura 2010. Desechó esa chance tras el 2-2 frente a un batallador Aurora y luego de desperdiciar casi una decena de jugadas claras de gol. El técnico Gustavo Quinteros dijo que no podía creer lo sucedido, pero está claro que en ofensiva el equipo no anduvo y más bien agigantó la figura de Silvio Dulcich, que tapó de todo.

Aprovechando las dudas en el medio, Aurora pasó a controlar ese sector en la primera parte con Jaime Robles y el “Chapulín” Cardozo como protagonistas. El buen dominio de ambos, asociado al empeño de Arévalo, permitió a la visita ponerse arriba en el marcador. A los 20’, y luego de un remate de Reynoso que tapó Hugo Suárez a medias, ingresó Osvaldo Moreno para empujar el balón antes del cruce de Hoyos. Sorpresa en el Tahuichi, pero poco después Jhasmani Campos igualó de penal, a los 39’ (picó la pelota), luego de que Moreno agarrara en el área al lateral Luis Gutiérrez.

En el complemento vino lo mejor del partido, porque la visita, a los 5’ de reanudado el juego, se volvió a poner arriba con un zapatazo de Robles luego de un contragolpe al que Nicolás Suárez llegó tarde. Caamaño y el arquero se vieron sorprendidos, pero no había otra. Aurora ya jugaba con uno menos por la expulsión de Rodríguez (36’), que había presionado a Campos y eso complicó el partido a la visita, que tuvo que soltar las marcas personales. Después del 2-1, Oriente fue una avalancha, generó nueve opciones claras de gol y sólo pudo convertir la de Mauricio Saucedo (76’) para el 2-2 tras un perfecto centro de Joselito Vaca, de lejos, el mejor del equipo local. Peinado, Hoyos, Campos, Caamaño, Ramírez…, nadie podía vulnerar la portería de Dulcich, que se agigantó.

Caamaño le dio con el pecho solo frente al arco, Campos remató a un costado con el meta jugado, Ramírez cabeceó en el poste, Saucedo hizo lo propio y el tercero no llegó.

A pesar del empate, la punta sigue cerca.

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