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martes, 25 de junio de 2013

Sport Boys trae a un cuarentón

La razon



Sport Boys de Warnes pateó el tablero del mercado de pases de la Liga con la contratación del argentino Esteban Fuertes, quien, a pesar de sus 40 años cumplidos, pretende “romper los arcos” del fútbol boliviano, como le anticipó al presidente del club, Mario Cronembold.

El Bichi Fuertes jugó hace un año su último partido oficial luciendo la camiseta de Colón de Santa Fe, club del cual es un ídolo, además un histórico por los 144 goles que anotó en los cuatro ciclos que estuvo en esa entidad. Pareciera que los años no han pasado para él, pues hasta el último partido con esa camiseta estuvo con la pólvora seca. Ese día marcó dos goles.

En ello se ha fijado Sport Boys para traerlo al país. “Me dijo que se había retirado del fútbol argentino, pero no dejó por completo la actividad, así que conversamos y llegamos a un acuerdo. Las negociaciones se hicieron rápido y durante las charlas que tuvimos me anunció que vendrá para romper nuestros arcos”, contó Cronembold.

Fuertes será el jugador con mayor edad que haya llegado al fútbol boliviano en los últimos tiempos. Antes de despedirse jugó al showbol, combinación del fútbol con el fútbol de salón, que tiene a Argentina como uno de los referentes en el continente.

En Sport Boys, que dirige el técnico mexicano David de la Torre, ya se imaginan la pareja de ataque conformada por el experimentado delantero boliviano Joaquín Botero y Fuertes.

“Me criticaron mucho por traer a Jaime Moreno, un delantero de la misma edad que Fuertes y fue una atracción porque mucha gente fue al estadio a ver a un futbolista que se fue al exterior muy joven”, según Cronembold. Recordó que fue Botero quien le dio el ascenso a Sport Boys, en una dramática final contra Petrolero.

Periodistas de Santa Fe contaron ayer que hace rato que Fuertes es un hombre de negocios, por tal motivo viaja mucho al interior de Argentina y también al exterior. Gran parte de su tiempo lo pasa en Buenos Aires, desde donde dirige varios de sus negocios. Luego de su salida de Colón apareció muy poco en programas y espacios deportivos de los medios.

De acuerdo con el titular del club de Warnes, el jugador podría llegar para los partidos de la Copa Cine Center del Sur, torneo que comenzará el 7 de julio con el duelo contra Guabirá. Sin embargo, antes debe arreglar algunos asuntos, sobre todo cancelar un viaje a España. Fuertes jugó en varios clubes como Independiente, Racing, River Plate, de su país; Tenerife (España), Universidad Católica (Chile), Lens (Francia) y Derby County (Inglaterra).

No se trata de un fichaje barato y el dirigente señaló que el acuerdo con una empresa privada de Santa Cruz, que se asoció al club, pondrá el dinero que hará realidad su llegada. “Queremos quedarnos mucho tiempo en la Liga, también vamos a apuntar lejos. El club pretende darle a Warnes una clasificación a un torneo internacional como es la Libertadores o la Sudamericana”.

Los que vinieron

Carlos López

Vino en 1985 para jugar en Bolívar. Tenía 34 años, después de haber estado parado seis meses tras jugar en Millonarios de Colombia. “Me consideraba un retirado del fútbol, pero apareció la oferta de Bolivia”. Su idea era estar en el país cuatro meses, pero no se fue nunca más.

Jairzinho

El brasileño, campeón del mundo con Brasil en Mundial de México 1970, fue contratado por Wilstermann a sus 36 años. Aterrizó en Cochabamba en 1980 y esa misma gestión se coronó campeón con el valluno, al que aportó con 16 goles. “Un compadre me llevó a Bolivia”.

Thomas N’kono

Es el más veterano de las figuras extranjeras que trajeron clubes bolivianos y no defraudó. Lo contrató Bolívar cuando había cumplido 39 años. El golero de la selección de Camerún en el Mundial de Italia 1990 sostuvo que su vinculación a la Academia “fue por casualidad”.

Silvio Carrario

Este notable goleador no pudo repetir con la camiseta de Bolívar lo que había hecho en clubes grandes de su país, como Racing Club y Boca Juniors. Llegó a la Academia a los 37 años y los celestes le rescindieron contrato cuatro meses después.

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