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sábado, 31 de mayo de 2014

La fiesta al final fue de los bolivianos

Una cosa fue el partido en la cancha y otra muy emotiva la fiesta de los bolivianos en el Sánchez Pizjuán. A diferencia de otros partidos y con resultados indecorosos, los bolivianos que fueron ayer al estadio sevillano para alentar a la selección salieron con la cabeza en alto y el pecho erguido, orgullosos de su selección, pese a la derrota. “El resultado es lo de menos, nosotros vinimos a ver a nuestra selección y nos vamos felices”, señaló emocionado Ricardo Zarco, un odontólogo cruceño que vive desde hace 15 años y se gana la vida en Extremadura, que está a dos horas de viaje por tierra. “No hay distancia que valga cuando uno se deja llevar por el sentimiento”, dijo.

Como él, más de 4.000 bolivianos que viven en la capital andaluza y otros que llegaron de lejos, por un momento se sintieron más bolivianos que nunca. A la llegada al estadio la selección tuvo un recibimiento como se merece y a la salida, también. Después del partido un puñado de hinchas acompañó a los jugadores hasta el hotel buscando un autógrafo, una foto y otros, con más suerte, una camiseta.

El partido organizado por los españoles para despedir a su selección, aprovechando el feriado en Sevilla, fue motivo de fiesta para los bolivianos


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