Los días de Carlos Chávez como presidente de la Federación Boliviana parecen estar contados, porque la Liga del Fútbol Profesional Boliviano (LFPB) como la Asociación Nacional de Fútbol (ANF), con la renovación de sus cuadros de dirección, han coincidido en pedir la renuncia del dirigente cruceño que por cerca a una década estuvo al frente de la entidad rectora.
Wálter Torrico, dirigente elegido como sucesor de Pedro Zambrano en la secretaria general de la FBF (cargo asignado al representante de las asociaciones), sobre el particular declaró que hoy se instalará la reunión de comité ejecutivo en Cochabamba a partir de las 15:00, y entre los puntos a considerar está la convocatoria a congreso extraordinario, y cuyo propósito central será devolverle ejercicio administrativo a la Federación, en el entendido de que hay tareas urgentes a desarrollar.
Torrico ante una pregunta en sentido de que en su momento, la Asociación de La Paz, del que es presidente, había apoyado la reelección de Chávez en la presidencia de la FBF, dijo que eso era efectivo, y que también hubo clubes ligueros que respaldaron a Carlos, pero después de la elección de octubre del año pasado, “las promesas de trabajar en perspectiva a un cambio en las estructuras del fútbol sólo quedó en eso, porque han pasados los meses y nada de eso se ha visto”, dijo.
Chávez no cumplió con su promesa de la reestructuración de nuestro fútbol, por tanto los dirigentes creemos que en esta nueva coyuntura, la dirigencia debe empezar a trabajar para cambiar las estructuras, porque es el tiempo para empezar a mejorar el fútbol nacional. En esa línea –prosiguió Torricose debe pensar en modificar estatutos y normas vigentes, lo que supondrá que el manejo de la Liga como de las asociaciones deben desaparecer, y apuntar a una sola cabeza, y eso supone que sea la Federación que debe manejar todo el contexto del fútbol nacional.
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